lunes, 15 de diciembre de 2014

Boletus en la nieve

Hemos tenido un año atípico y bastante suave en cuanto a temperaturas, el verano no fue caluroso y se alargó más de lo normal, luego vino un otoño con temperatura casi primaverales, y no ha hecho frío de verdad hasta bien entrado diciembre. Por lo menos en Madrid. Estas condiciones junto con  unas generosas precipitaciones son idóneas para la que ha sido una fructífera temporada de setas. En cuanto empiezan las heladas se acabó

Aquí os cuento la que fue mi última salida al campo de esta año a por boletus, una jornada muy muy bonita que disfuté como un enano
Nada más llegar al sitio me doy cuenta que las condiciónes son óptimas, ha llovido hace unos días y el suelo está húmedo
No tardo en encontrar los primeros boletus edulis, los pobrecillos aparecen ya en algunos sitios cubiertos de hielo


Detalle de dos ejemplares asomando un poquillo entre las ramitas y la nieve


Os enseño ahora varias series de boletus muy bien escondidos, cómo los veo y cómo quedan al descubrilos un poco. Da un subidón tremendo encontrarlos así!!





Fuera del pinar hace un día fresco pero buenísimo, dentro del pinar pasé mucho frío entre la sombra y la nieve derritiénfose sobre mi cabeza, acabé empapado


Precioso barrigudo


Y la cesta va cogiendo un color especial



Encontré mucha variedad de setas como esta preciosa, venenosa y alucinógena amanita muscaria


O estas rusulas sp.


Fue curioso porque la distribución de boletus fue muy irregular, me pude pasar más de una hora sin ver ni uno, y de repente en diez minutos sacar cinco o seis, que alegría!!


Estos cinco magníficos estaban bastante cerca unos de otros


Dependiendo la cota encontraba más o menos nieve


A menos altitud no había ni rastro de la nieve, la verdad que es un privilegio escaparse de Madrid y gastar la suela de mis botas pateando un monte tan bonito 


Detalle de una amanita muscaria "naciendo"



Pequeño boletus pinícola, primo hermano del edulis, también muy apreciado culinariamente 


Y otro pinícola de buen tamaño


También encontré otros ejemplares de la familia boletus menos "importantes"


Incluso se dejaron ver algunos níscalos



Y llegando ya al coche me despidió hasta dentro de unos meses esta familia de pequeñas setas, identificación pendiente


El resultado de la jornada es impresionante, una auténtica gozada cargar hasta el coche con esta cesta llenísima de boletus edulis


A día de hoy con el frío de diciembre el monte está ya con las heladas, habrá que esperar hasta la temporada que viene para volver a la carga en busca de estas joyas
Por suerte tenemos en el congelador bastantes setas para ir disfrutándolas los próximos meses, recordando estos días mágicos que nos brinda la Naturaleza

Besos y abrazos

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